Un lance, siglo XVII

Un lance, siglo XVII

Francisco Domingo Marqués (València, 1842 - Madrid, 1920)

Se trata del primer trabajo de empeño emprendido por el artista, sin duda, con objeto de demostrar al público sus habilidades como pintor. Domingo se esmera en describir con franqueza las calidades y texturas de telas, así como en caracterizar, a través de la expresión del rostro, las emociones que embargan a los protagonistas. El pintor demuestra su destreza para captar el gesto preciso que expresa la inquietud de uno y el honor satisfecho del otro. Se trata de una pintura de gran simplicidad compositiva, que emplea una paleta oscura de ocres y pardos, sin concesiones retóricas complejas. Anuncia esa ejecución fresca y valiente que caracterizará su obra madura. Gracias a la iluminación escenográfica, consigue dar una ambientación dramática, que se ha relacionado con una forma barroca de concebir los asuntos, lo que sitúa al pintor en la senda revisionista de los viejos maestros.

La obra figuró en la Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid de 1866, donde fue premiada con una medalla de tercera clase y adquirida por el gobierno.