La última comunión de la Magdalena

La última comunión de la Magdalena

Jerónimo Jacinto de Espinosa (Cocentaina, 1600 - València, 1667)

Obra de madurez de Espinosa, firmada y fechada en 1665, fue pintada para el altar mayor del noviciado de los capuchinos de la Magdalena de Massamagrell, donde la citan Orellana y Ceán, ingresando posteriormente en el Museo con la desamortización. Con gran efecto escenográfico y estudio del gesto, Espinosa representa ante un altar a María Magdalena arrodillada recibiendo con fervor la comunión que le ofrece un sacerdote revestido con casulla y manípulo. A los pies de la santa aparecen una calavera y el pomo de ungüentos y en lo alto un rompimiento de gloria con ángeles músicos y querubines. El clérigo que asiste en primer término a la eucaristía debió ser el donante de la pintura. El tema representado, aunque apócrifo, se configura como instrumento propagandístico ideal para la exaltación de los grandes sacramentos promovidos por la Iglesia contrarreformista: la Penitencia y la Eucaristía.