Esta exposición de fondos propios del Museo de Bellas Artes de Valencia corresponde a un periodo cronológico comprendido entre la segunda mitad del siglo XIX y la primera mitad del XX.

La muestra, que cuenta con un total de más de 50 obras, se articula alrededor de cinco temas: retrato femenino; retrato de niños; paisaje; pintura costumbrista; y pintura social, o realismo social. Su  composición se ha materializado integrando estos géneros que se encuentran tan eficazmente representados por pintores valencianos y nacionales en el Museo, tales como: Joaquín Sorolla, Ignacio y José Pinazo, Joaquín Agrasot, José Benlliure, Manuel Benedito, Julio Peris Brell, Antonio Fillol, Cecilio Pla, Francisco Pradilla, Aureliano de Beruete, Hermen Anglada Camarasa, Darío de Regoyos e Ignacio Zuloaga entre otros.

Las obras de Joaquín Sorolla e Ignacio Pinazo, junto con el también valenciano Antonio Muñoz Degraín ―que se expone en la sala contigua―, constituyen la base sobre la que se gesta la importantísima renovación de la pintura valenciana de la época. En torno a ellos surgen gran cantidad de artistas que superan los caducos planteamientos estéticos anteriores y desarrollan su propio estilo, enlazando con el gusto de una sociedad más sensibilizada cada vez con la nueva manera de concebir la luz y los colores, confiriéndoles a ambos un protagonismo excepcional.

La mayoría de los pintores contaron con una formación común y una trayectoria profesional similar, formándose en las Escuelas de Bellas Artes, y posteriormente obteniendo pensiones para ampliar estudios en Paris o Roma, donde observaron otras corrientes plásticas del momento que provocaron en ellos un cambio sustancial en la manera de concebir el arte. También coincidieron en las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes, con lienzos de gran formato que se exhiben ahora como Floreal o La gloria del pueblo.