« Atrás

Ara funeraria

Ara funeraria

Ara funeraria

La única ara conocida de Edeta destaca tanto por la calidad de su ejecución como por la exuberante decoración con la que se adorna.

Realizada en mármol blanco que bien podría proceder de las canteras de Carrara, en el norte de Italia, de donde fue importada, el ara edetana está redondeada por arriba. Los cuatro ángulos superiores estaban adornados con acróteras de las que sólo quedan restos. Le falta también el ángulo inferior izquierdo y parte del bucráneo de la derecha. En el frontón, un águila lucha con una serpiente, en alusión a la apoteosis del difunto. Todas las caras están alisadas, a excepción de la frontal, que presenta una decoración exuberante e insólita en la epigrafía del territorio valenciano, que por lo general suele reducirse al marco moldurado en torno al texto. El campo epigráfico está rebajado y delimitado por una cinta y una cyma recta. A ambos lados del campo epigráfico hay sendos bucráneos de los que cuelgan guirnaldas de flores y frutos. Debajo del campo epigráfico se representa la cara de Gorgona o Medusa, en referencia a la inmortalidad del alma del difunto. En las esquinas sobre el zócalo reposan unos animales. Sólo un lapidarius de origen itálico o formado allí pudo combinar de una forma tan brillante los diferentes elementos decorativos cargados de una fuerte simbología.

La inscripción, «D(is) M(anibus) / CORN(eliae) PANTH- / ERAE UXORI / OPTUMAE L(ucius) / LIC(inius) NICOMED- / ES ET SI BI» [A los dioses Manes. Lucio Licinio Nicomedes (ha hecho este monumento) para su excelente esposa, Cornelia Pantera, y para sí], que se grabó en algún taller local, está realizada en letra capital cuadrada, con una pequeña hoja de hedera como signo de interpunción y con cortes asilábicos.

Tanto los Cornelii como los Licinii constituían dos de las familias más destacadas de Liria Edetanorum. Los cognomina Pantera y Nicomedes, de origen griego, sólo aparecen aquí en la Península, por lo que se trataría, probablemente, de un matrimonio de origen servil.

La pieza fue descubierta a principios de febrero del año 1889 en Llíria, en la partida de Mura, a raíz de los desmontes hechos para construir la estación del ferrocarril de Aragón, que no se llevó nunca a término, y por mediación de Manuel González Martí pasó en 1910 al Museo de Bellas Artes de València.

Datación:

Siglo II d. C.

Técnica:

Tallado. Mármol

Dimensiones:

72 x 44 x 33 cm

Número de inventario:

1529

Procedencia:

Llíria (València)